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El gobierno de Venezuela ha liberado a seis ciudadanos estadounidenses detenidos en su territorio, tras una reunión entre el presidente Nicolás Maduro y Richard Grenell, enviado especial del presidente Donald Trump. Grenell compartió en la plataforma X una fotografía con los liberados a bordo de un avión, sin revelar sus identidades, y expresó: «Nos ponemos en marcha y nos dirigimos a casa con estos seis ciudadanos estadounidenses. Acababan de hablar con Donald Trump y no podían dejar de agradecerle».
La misión de Grenell en Venezuela tenía como objetivo principal la liberación de los ciudadanos estadounidenses detenidos en cárceles venezolanas. Además, buscaba negociar con Caracas la aceptación de vuelos de deportación de migrantes indocumentados. Según la organización Independent Venezuelan American Citizens (IVAC), con sede en Miami, había ocho ciudadanos estadounidenses presos en Venezuela, la mayoría desde 2024.
Tras el encuentro entre Maduro y Grenell en el Palacio de Miraflores, la administración chavista emitió un comunicado indicando que uno de los «diversos temas de interés para ambos países» abordados fue la situación de «ciudadanos estadounidenses incursos en delitos en territorio nacional», así como la migración y el impacto «negativo» de las sanciones económicas.
Esta liberación se produce en un contexto de tensas relaciones entre Estados Unidos y Venezuela. Aunque Washington no reconoce a Maduro como presidente legítimo, la intervención de Grenell y la liberación de los detenidos podrían abrir la puerta a futuros diálogos y acuerdos entre ambos países.
