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El Presidente de Guyana, Mohamed Irfaan Ali, condenó este sábado la incursión de un buque patrullero de la Guardia Costera de Venezuela en las aguas territoriales guyanesas, un acto que calificó como una violación directa de la soberanía del país y un motivo de “grave preocupación”.
En su declaración oficial, Ali relató que el incidente ocurrió alrededor de las 7 de la mañana, cuando el buque patrullero venezolano, identificado como ABV Guaiquerí PO-11, se acercó a un petrolero cercano a una unidad flotante de producción, almacenamiento y descarga (FPSO) en la zona económica exclusiva de Guyana. El mandatario guyanés subrayó que tanto el petrolero como el FPSO Prosperity operan legalmente en esa área, conforme a las leyes internacionales.
Durante el incidente, el buque patrullero venezolano transmitió un mensaje de radio en el que afirmaba que el FPSO estaba operando en lo que calificó como «aguas internacionales en disputa», antes de continuar su ruta hacia otros FPSO en la región.
El presidente de Guyana fue claro en su respuesta: “Las fronteras marítimas de Guyana están reconocidas por el derecho internacional, y esta incursión es motivo de grave preocupación. Sin embargo, les aseguro que mi Gobierno no está actuando precipitadamente. Estamos manejando esta situación con seriedad y responsabilidad”.
Ali también anunció que convocará de manera inmediata al embajador de Venezuela en Georgetown para expresarle la protesta formal del Gobierno guyanés. Además, a través de su embajador en Caracas, Guyana presentará una queja formal ante el Gobierno venezolano.
El presidente guyanés informó que también alertó a la presidenta del Caricom, Mia Mottley, y al primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, sobre lo sucedido. Ambos líderes internacionales serán informados sobre la violación del Acuerdo de Argyle, así como las órdenes cautelares de la Corte Internacional de Justicia.
En cuanto a las acciones internacionales, Irfaan Ali reveló que Guyana llevará el asunto ante la Corte Internacional de Justicia, así como a la atención de las Naciones Unidas, la Organización de los Estados Americanos y la Commonwealth, entre otras instancias globales. “Colaboraremos con socios internacionales para asegurar que se respeten nuestra soberanía y derechos, conforme al derecho internacional”, expresó.
A pesar de la tensión generada, el mandatario guyanés reafirmó el compromiso de su país con la paz y el estado de derecho, pero dejó claro que no tolerarán amenazas a su integridad territorial. “Seguimos comprometidos con soluciones diplomáticas, pero no vamos a permitir ninguna amenaza a nuestra soberanía. Nuestros equipos de seguridad y relaciones exteriores están completamente involucrados y monitoreando todos los desarrollos”, agregó.
El presidente Ali prometió mantener al país informado sobre cualquier novedad relacionada con el incidente y las acciones que tome el Gobierno en respuesta.