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La empresa SpaceX, fundada por Elon Musk, confirmó este jueves que perdió contacto con su cohete Starship poco después de su lanzamiento, en lo que fue el octavo vuelo de prueba de este potente vehículo espacial. Según la compañía, el fallo ocurrió en la fase de ascenso, aproximadamente 20 segundos antes de completar el despegue, debido a la pérdida de motores y control del vehículo.
A través de su cuenta oficial en X, SpaceX indicó: «La etapa superior de la nave Starship para el vuelo 8 se perdió después de perder los motores y el control de la actitud unos 20 segundos antes de completar su ascenso». La empresa también anunció que iniciará una investigación exhaustiva para determinar las causas de este incidente, que recuerda a un fallo similar ocurrido durante el vuelo 7 de Starship en enero de este año.
Durante el ascenso, la nave experimentó un «desmontaje rápido e imprevisto», lo que resultó en la pérdida de contacto. Ante esta situación, el equipo de SpaceX comenzó a coordinar con los funcionarios de seguridad para implementar los procedimientos de contingencia previamente establecidos. A pesar de este revés, la parte inferior del cohete, el Super Heavy, logró regresar con éxito a la base en Texas, lo que fue aplaudido por el público presente en el evento.
Este incidente se produce después de varios intentos fallidos de lanzar el cohete, incluidos tres retrasos de la prueba, originalmente programada para el 28 de febrero. Uno de los retrasos fue debido a problemas técnicos, mientras que otro se originó después de la explosión de una nave de SpaceX en enero, cuyos restos se esparcieron por el Caribe. A raíz de este suceso, la Administración Federal de Aviación (FAA) abrió una investigación.
A pesar de la investigación en curso, SpaceX contaba con la autorización de la FAA para realizar esta nueva prueba. Durante la transmisión en vivo, Dan Huot, portavoz de SpaceX, explicó: «Vimos que varios de los motores empezaron a apagarse. Una vez que se pierden suficientes motores centrales, se pierde el control de la actitud. Entonces, vimos que la nave comenzó a girar y fue en ese momento cuando perdimos contacto».
La nave Starship despegó a las 18:30 hora local (23:30 GMT) desde la base de SpaceX en Boca Chica, en el sur de Texas, cerca de la frontera con México. A pesar de los contratiempos, el equipo de SpaceX se comprometió a analizar detalladamente los datos del vuelo y continuar con los esfuerzos para perfeccionar el vehículo para futuras misiones.
