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Elon Musk anunció recientemente la cancelación de su suscripción a Netflix, citando preocupaciones sobre la exposición de contenido infantil que considera excesivamente “woke”. La polémica se centra en la serie animada Dead End: Paranormal Park, que incluye personajes LGBTQ+, como una chica bisexual y autista y un personaje transgénero.
Musk compartió un clip de la serie en sus redes sociales, instando a sus seguidores a cancelar sus propias cuentas, lo que provocó un boicot masivo hacia la plataforma.
La controversia se intensificó luego de que se difundieran comentarios del creador de la serie, Hamish Steele, relacionados con la muerte del activista conservador Charlie Kirk, interpretados por algunos como burlas, aunque Steele negó cualquier intención de celebrar el hecho.
Este episodio ha reavivado el debate sobre la representación en los medios infantiles y el papel de las redes sociales en la amplificación de discusiones culturales sobre identidad y valores familiares.
