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El Ejército israelí confirmó este sábado la muerte de tres palestinos en el sur de la Franja de Gaza, alegando que se aproximaron a las tropas desplegadas en la denominada “línea amarilla”, pese al alto el fuego vigente desde el 10 de octubre.
En un primer ataque, soldados dispararon contra “dos sospechosos que cruzaron la línea amarilla”, considerados por el Ejército una “amenaza inmediata”. Según una fuente médica del Hospital Naser, las víctimas fueron dos hermanos menores de edad, abatidos en la ciudad de Bani Suheila, al este de Jan Yunis.
La ciudad se encuentra dentro del 54 % de la Franja aún controlada por Israel, donde las tropas continúan abriendo fuego casi a diario contra palestinos.
En un segundo incidente ocurrido en la mañana, otro palestino murió tras acercarse demasiado a las tropas, según el comunicado castrense.
Balance tras el alto el fuego
- Desde el inicio del alto el fuego, al menos 357 palestinos han muerto.
- Más de 900 personas han resultado heridas, según datos del Ministerio de Sanidad gazatí.
- Los equipos de rescate de la Defensa Civil han recuperado unos 600 cuerpos sin vida entre los escombros, en una Franja devastada donde más del 80 % de los edificios han sido destruidos o dañados.
La situación refleja la persistente violencia en Gaza, incluso bajo el alto el fuego, y el impacto devastador sobre la población civil.
