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En una audiencia el 26 de este mes, el Juez de Atención Permanente de la provincia Santo Domingo dictó una medida de prisión preventiva de un año para Ana Josefa García, la madre de la niña de seis años encontrada decapitada en el sector Hainamosa.
García, quien se enfrenta a cargos de homicidio con premeditación, admitió haber cometido el crimen, argumentando que actuó bajo la creencia de que Dios la salvaría de las consecuencias, similar a la historia bíblica de Abraham e Isaac. «Pensé que el Señor me iba a rescatar, así que decidí decapitar a mi hija», declaró García, quien también alegó estar embarazada y haber sufrido maltrato durante su detención.
El Ministerio Público ha calificado provisionalmente el acto como homicidio con premeditación y asechanza, basándose en los artículos 295, 296, 297 y 304 del Código Penal Dominicano. La acusada permanecerá en el Centro Penitenciario Najayo Mujeres mientras continúan las investigaciones para esclarecer los detalles del caso.
