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La Organización de las Naciones Unidas (ONU) manifestó este miércoles su «profunda preocupación» por la creciente tensión entre Estados Unidos y Venezuela, luego de que un ataque estadounidense en el mar Caribe dejara once presuntos integrantes de la banda criminal transnacional Tren de Aragua muertos.
El portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric, recordó que las diferencias entre Estados deben resolverse conforme al derecho internacional y a la Carta de Naciones Unidas.
Al ser cuestionado sobre la legalidad del ataque, Dujarric evitó pronunciarse directamente y señaló la complejidad que representa la lucha contra el narcotráfico y el crimen transnacional. «El tráfico internacional de drogas constituye una gran amenaza para la región y más allá», indicó, subrayando que toda acción contra ese flagelo debe realizarse «bajo el imperio de la ley».
En días recientes, el Gobierno venezolano solicitó la intervención del secretario general ante la llegada de varios destructores estadounidenses a las cercanías de sus aguas territoriales, en medio de un pico de tensión sin precedentes. Sin embargo, António Guterres se ha limitado a reiterar llamados a la desescalada.
Por su parte, el presidente estadounidense, Donald Trump, calificó a los fallecidos como «narcoterroristas» y advirtió que operaciones similares continuarán: «Tenemos que proteger a nuestro país, y lo vamos a hacer. Venezuela es un muy mal actor. No vamos a tolerarlo más», declaró ante la prensa.
