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El ministro de Educación, Ángel Hernández, ha destacado que los avances en el sistema educativo no se materializan de forma inmediata. Según Hernández, las reformas actuales comenzarán a mostrar sus frutos en el largo plazo, con una perspectiva mínima de 12 años para observar cambios significativos.
Hernández subrayó que, para lograr una mejora real en la calidad educativa, es crucial no solo centrarse en el aprendizaje de los niños desde los primeros años, sino también mantener una continuidad en estos esfuerzos a lo largo del tiempo. Aseguró que el éxito en el ámbito educativo no necesariamente requiere de un incremento en los recursos financieros, sino de contar con docentes bien capacitados y dedicados al desarrollo académico de los estudiantes.
El ministro puso como ejemplo a Portugal, que ha logrado una notable mejora en su sistema educativo gracias a su enfoque en la capacitación de directores y maestros, así como en la integración de los padres en el proceso educativo. “Estamos adoptando las estrategias que han demostrado ser efectivas en otros países y fortaleciendo los aspectos clave de nuestro sistema educativo,” comentó Hernández.
Además, el ministro enfatizó la importancia de despolitizar el sistema educativo, resaltando que las decisiones deben tomarse con base en el beneficio del sistema en su conjunto y no en intereses particulares. “Las decisiones se hacen pensando en el mejor interés del sistema educativo, no en
intereses individuales,” agregó Hernández.
En conclusión, Hernández reiteró que la calidad de la educación depende en gran medida de tener docentes bien preparados y de fomentar la participación activa de los padres. Estos son los pilares fundamentales que permitirán mejorar la educación en el país.
