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El país enfrenta una crisis energética sin precedentes, con apagones prolongados que han generado un clima de descontento en diversas regiones. El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ha señalado que la situación se debe a la falta de capacidad del gobierno actual para gestionar el sector energético, afirmando que carecen del personal especializado necesario para abordar la crisis.
Según los miembros del PLD, el gobierno ha demostrado una clara incapacidad para resolver los problemas del sector, lo que está afectando gravemente a la población. Las interrupciones eléctricas, que en algunos barrios se extienden hasta por 15 horas o más, han llevado a la Secretaria de Energía y Minas del PLD a afirmar que el país ha retrocedido catorce años en términos de infraestructura energética.
La situación se ha tornado insostenible en varios barrios, donde las protestas están en aumento. En el municipio de Los Ríos en Neyba, los residentes han salido a las calles para expresar su rechazo a los continuos apagones. En la capital, la frustración se ha dirigido hacia Celso Marranzini, presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad, quien ha declarado que aproximadamente 800 mil personas en el país están involucradas en el robo de electricidad.
Los ciudadanos afectados han instado al gobierno a tomar medidas urgentes para resolver la crisis de los apagones y mejorar la estabilidad del suministro eléctrico.
