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Puerto Príncipe.- La educación de más de 100,000 menores desplazados en el Gran Sur de Haití enfrenta serias amenazas debido al incremento continuo de la violencia en Puerto Príncipe y sus alrededores. Unicef advirtió este miércoles que la creciente inseguridad ha puesto una presión inmensa sobre las comunidades locales y ha deteriorado aún más los ya frágiles servicios sociales en la región.
En un comunicado divulgado a tres semanas del inicio del nuevo año escolar en Haití, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) destacó que, para muchas familias haitianas, el inicio del curso escolar representa un momento de esperanza y renovación.
Sin embargo, con más de 270,000 personas desplazadas hacia el sur, las familias en situación de desplazamiento enfrentan enormes dificultades para garantizar una educación adecuada para sus hijos e hijas.
