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En un emocionante regreso, la icónica banda de Nu Metal estadounidense Linkin Park ofreció un memorable concierto en el O2 de Londres, marcando su primer encuentro con los fans británicos en siete años. Esta vez, la voz de Emily Armstrong tomó el centro del escenario, ofreciendo una nueva perspectiva al legado de la banda tras la pérdida de Chester Bennington.
El recinto, repleto de seguidores, estalló en un estallido de energía al escuchar clásicos como «Somewhere I Belong», «Crawling» y «Lying From You», que abrieron una noche llena de emociones. Desde el primer acorde, la conexión entre la banda y el público fue palpable, evocando recuerdos de sus anteriores actuaciones.
Emily Armstrong, en su papel protagónico, hizo vibrar a los asistentes al interpretar canciones emblemáticas como «What I’ve Done» y «Leave Out All the Rest», incluso compartiendo momentos de profunda emoción que la llevaron a las lágrimas. Su presencia fue recibida con vítores y el nombre de la nueva vocalista resonó en el recinto, consolidando su aceptación por parte de los fans.
Durante más de dos horas, Linkin Park no solo revisó su impresionante repertorio, sino que también invitó a la reflexión con temas como «Leave Out All the Rest» y «My December». Esta actuación marcó no solo un regreso a la escena, sino también un nuevo capítulo en la historia de una banda que ha dejado huella en toda una generación.
