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La costa del golfo de Florida se encuentra en alerta máxima ante la inminente llegada del huracán Milton, un fenómeno meteorológico que podría generar una marejada ciclónica devastadora. Esta situación se agrava debido a que muchas áreas aún se recuperan de los estragos causados por el huracán Helene hace apenas 12 días, y por el caos ocasionado por Ian hace dos años.
Desde la mañana del martes, casi toda la costa oeste de Florida está bajo advertencia de huracán, con Milton acercándose a una velocidad de 14 km/h (9 mph) y vientos que alcanzan los 250 km/h (155 mph). Aunque Milton perdió algo de intensidad y se encuentra en categoría 4, meteorólogos advierten que sigue siendo una amenaza extremadamente grave para la región.
El huracán se intensificó rápidamente el lunes, alcanzando categoría 5, con vientos sostenidos de hasta 285 km/h (180 mph). Se espera que su vórtice toque tierra en la zona de Tampa Bay el miércoles, un área que no ha enfrentado un huracán de tal magnitud en más de un siglo. Aunque los pronósticos sugieren que podría debilitarse ligeramente, todavía se anticipa que Milton mantendrá su fuerza mientras se desplaza hacia el centro de Florida.
Además, se prevé que el huracán evite otras áreas que ya han sido golpeadas por Helene, que dejó un saldo trágico de al menos 230 muertes en su paso por Florida y los Apalaches. Las autoridades de Tampa Bay están particularmente preocupadas, ya que la última vez que la región experimentó un impacto directo de un huracán de esta envergadura fue en 1921, lo que aumenta el temor entre sus 3,3 millones de habitantes.
Ante la situación crítica, el presidente Joe Biden ha declarado el estado de emergencia en Florida, movilizando a 7,000 trabajadores federales para responder a la crisis. La alcaldesa de Tampa, Jane Castor, enfatizó la gravedad de la situación: “Esto de Milton es en serio. Si intentas desafiar a la Madre Naturaleza, ella siempre ganará”.
Las autoridades han emitido órdenes de evacuación para las comunidades costeras, ya que se estima que Milton podría generar marejadas de entre 2,4 y 3,4 metros (8 a 12 pies). Los residentes han comenzado a evacuar, siguiendo las advertencias después de las dificultades vividas durante las tormentas anteriores. Un aumento en el tráfico se ha registrado en dirección al Panhandle de Florida, con muchos buscando refugio en áreas más seguras.
El tiempo apremia y, a medida que Milton se acerca, la población de Florida enfrenta una de las pruebas más difíciles de los últimos años.
