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La vicealcaldesa de Nueva York, Sheena Wright, presentó su renuncia el pasado martes, marcando un hito al convertirse en la octava alta funcionaria en dejar su cargo en medio de un escándalo de corrupción que ha salpicado a la administración del alcalde Eric Adams. Su renuncia es especialmente significativa, dado que Wright ha sido una figura clave y confidente del alcalde, quien actualmente enfrenta múltiples investigaciones federales.
El mes anterior, se realizaron registros en la residencia de Wright y se confiscó su teléfono, un movimiento que también afectó a otros funcionarios que ya habían dimitido, como Philip Banks, vicealcalde de Seguridad Pública, quien dejó su puesto el lunes. La situación ha desencadenado una ola de dimisiones, incluyendo al comisionado de Educación, David Bank, esposo de Wright y hermano de Banks, ambos bajo investigación.
Además de ellos, el jefe de policía Edward Cabán y Timothy Terence, uno de los asesores más cercanos de Adams, también han abandonado sus cargos. A esta lista se suman Winne Greco y Mohammed Bahi, quienes trabajaban como enlaces comunitarios y que también renunciaron el lunes. Cabe destacar que Bahi fue arrestado recientemente por interferir en la investigación relacionada con la administración y se enfrenta a cargos de manipulación de testigos y destrucción de pruebas.
Por otro lado, Rana Abbasova, directora de protocolo en la oficina de asuntos internacionales, fue despedida tras estar de licencia. La crisis se intensifica y la incertidumbre sobre el futuro del gobierno local crece en un clima de creciente escrutinio público.
