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En la era digital actual, el acceso a internet se ha convertido en una necesidad fundamental para la educación, el trabajo y la vida diaria de millones de personas. En este contexto, la República Dominicana ha logrado destacarse en Latinoamérica al ubicarse entre los diez países con internet más barato de la región, según un reciente estudio de la firma británica Cable.co.uk.
El estudio muestra que el costo promedio por gigabyte (GB) de datos móviles en la República Dominicana es de USD 0.79, posicionando al país en la octava posición en términos de asequibilidad dentro de Latinoamérica. Este costo es notablemente inferior al promedio mundial de USD 3.42 por GB, subrayando la ventaja económica que ofrece el país en comparación con otras naciones, tanto a nivel regional como global.
Desde su primera conexión a internet en 1995, inicialmente mediante servicios fijos y posteriormente a través de telefonía móvil, la República Dominicana ha avanzado significativamente en términos de conectividad y tecnología. La evolución de la infraestructura y el incremento en la competencia entre proveedores han jugado un papel clave en la mejora de la calidad del servicio y la reducción de costos para los usuarios.
No obstante, a pesar de estos avances y su favorable posición en el ranking regional, persisten desafíos que afectan el precio del internet en el país. José Flores, ingeniero en telecomunicaciones, explicó a De Último Minuto que la carga tributaria sobre el servicio de internet es un factor determinante en su costo final.
Flores indicó que la factura de internet en la República Dominicana incluye un 18% por Impuesto sobre Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), un 10% por Impuesto Selectivo al Consumo, y un 2% por Contribución para el Desarrollo de las Telecomunicaciones, lo que suma un 30% de impuestos sobre el monto total pagado. Esta alta carga impositiva coloca al país entre los que tienen mayor presión tributaria sobre los servicios de telecomunicaciones en la región, limitando así la posibilidad de ofrecer precios aún más competitivos y accesibles para la población.
