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Con el incremento alarmante en las muertes de migrantes en la frontera entre México y Estados Unidos, las autoridades han decidido utilizar un globo aerostático equipado con avanzados sensores y cámaras de alta resolución para mejorar la seguridad de los migrantes. Este innovador dispositivo está diseñado para detectar y ayudar a aquellos en peligro, especialmente en las zonas remotas y peligrosas entre Ciudad Juárez y Nuevo México.
El globo aerostático proporciona a los agentes fronterizos estadounidenses una visión extensa de áreas inaccesibles desde el suelo, permitiendo la identificación temprana de migrantes en situaciones críticas. Este método es crucial en regiones donde las duras condiciones climáticas y el terreno inhóspito representan una amenaza significativa para la vida de los migrantes.
Durante 2023, el sector fronterizo de El Paso (Texas) reportó 151 muertes de migrantes, principalmente por deshidratación, agotamiento y ahogamientos en el río Bravo o Grande. Sin embargo, en 2024, ya se han registrado 174 muertes entre enero y agosto, reflejando un preocupante aumento.
Las autoridades locales y las organizaciones humanitarias en México atribuyen este aumento a las extremas condiciones climáticas y a la búsqueda de rutas más peligrosas debido al endurecimiento de las políticas migratorias en Estados Unidos.
El guatemalteco Moisés Méndez, quien ha vivido en carne propia las dificultades del cruce, subraya la importancia del globo aerostático: «Es una gran ayuda porque el sufrimiento en el desierto es inmenso. Muchas personas mueren por cansancio, sed o hambre y ni siquiera son reconocidas por sus familias.»
Esta nueva tecnología promete ser un avance significativo en la protección de los migrantes y en la reducción de las tragedias en la frontera.
