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Con la reciente propuesta de aplicar impuestos a las plataformas digitales y compras en línea, muchos sectores de la economía dominicana podrían verse gravemente afectados. Estas plataformas y servicios, que van desde transporte, alojamiento, entretenimiento en el hogar, hasta herramientas de trabajo para pequeños negocios y creadores de contenido, forman parte integral de la vida diaria de muchos dominicanos.
A continuación, detallamos los impactos que estos nuevos impuestos tendrán sobre los usuarios, las pequeñas y medianas empresas (PYMES), el acceso a la educación, el turismo, y otros sectores clave de la economía.
Impuestos a compras por debajo de 200 dólares
Uno de los aspectos más criticados de esta reforma es la propuesta de gravar las compras en línea por debajo de 200 dólares, que hasta ahora estaban exentas de impuestos. Esto significa que muchos consumidores que buscan ahorrar al comprar productos en línea, como tecnología, ropa, o accesorios, se enfrentarán a precios más altos. Un ejemplo concreto: si un producto costaba 180 dólares, con un impuesto del 18%, su precio final sería de 228.60 dólares, sin contar los servicios de courier, que ya están gravados con otro 18%. Esta medida afecta directamente a los consumidores que dependen de las compras en línea para acceder a productos más baratos y competitivos en comparación con los ofrecidos en el mercado local, golpeando especialmente a las familias de bajos y medianos ingresos.
Aumento en el costo de transporte con Uber y DiDi
Para aquellos que usan Uber, Uber Moto o DiDi para sus desplazamientos diarios, los impuestos también traerán consigo un incremento en los costos de transporte. Un viaje que actualmente cuesta RD$200, con un impuesto del 18%, aumentaría a RD$236. Además, un ciudadano que necesite de este tipo de transporte todos los días, al mes tendrá que pagar cerca de RD$900 adicionales solo en impuestos. Esto no solo afecta a los pasajeros, sino también a los choferes que dependen de estas plataformas para generar ingresos. Menos viajes significa menos oportunidades para quienes trabajan en estas plataformas, lo que impacta tanto a los conductores como a sus familias, quienes ya enfrentan dificultades en el contexto económico actual.
Impacto en los creadores de contenido y freelancers: el caso de YouTube
Los creadores de contenido en línea, como los que operan canales de YouTube, son uno de los sectores más afectados por los nuevos impuestos. Plataformas como YouTube permiten a miles de dominicanos generar ingresos a través de la creación y distribución de contenido. Sin embargo, los impuestos adicionales a los servicios digitales dificultarán la capacidad de estos creadores para competir en un mercado global. Los costos operativos aumentarán, ya que muchas de las herramientas que utilizan para crear y editar contenido (como Adobe o Canva) también estarán sujetas a impuestos, reduciendo los márgenes de ganancia y dificultando su crecimiento.
Este golpe a los creadores de contenido no solo afecta a quienes ya trabajan en plataformas como YouTube, sino que también desincentiva a futuros talentos que buscan emprender en el mundo digital, limitando sus oportunidades de crecimiento en un mercado global cada vez más competitivo.
Impacto en pequeñas y medianas empresas (PYMES)
Las PYMES que dependen de servicios de comunicación digital para llegar a sus clientes enfrentarán aumentos en sus costos operativos. Empresas que necesitan de aplicaciones dgitales para su comunicación y marketing verán cómo las herramientas que utilizan se encarecen. Estas empresas, que ya luchan por mantenerse competitivas en un entorno económico desafiante, verán cómo las herramientas que utilizan para la publicidad, el marketing y la comunicación con sus clientes se vuelven más costosas. Esto podría reducir su capacidad de competir.
El acceso a la educación en línea
Plataformas educativas como Coursera, Udemy, y Duolingo también estarán sujetas a los nuevos impuestos. Esto representa un obstáculo para miles de dominicanos que dependen de la educación en línea para avanzar en su desarrollo profesional y académico. En un momento donde la formación digital es clave para mejorar las oportunidades laborales, encarecer el acceso a estos recursos es un retroceso que afecta tanto a estudiantes como a profesionales.
Aumento en el costo de delivery
Al igual que en el transporte, las plataformas de delivery como Pedidos Ya y Uber Eats también verán un aumento en sus costos debido a los nuevos impuestos. Esto afecta tanto a los consumidores que dependen de estos servicios como a los pequeños restaurantes que los utilizan para llegar a sus clientes. Un pedido que cuesta RD$500 podría aumentar a RD$590 con los nuevos impuestos, lo que reduce el poder adquisitivo de los consumidores y afecta la rentabilidad de los pequeños negocios que dependen de las ventas a través de estas plataformas.
Menor atractivo turístico y menor ingreso para pequeños propietarios
Las plataformas de alojamiento como Airbnb y Booking también verán un aumento en los precios, lo que reducirá el atractivo de República Dominicana como destino turístico. A esto se suma la reducción en las ganancias de los pequeños propietarios que dependen de estas plataformas para obtener ingresos adicionales. El impacto será especialmente significativo en el sector turístico, que es uno de los motores de la economía dominicana.
Menos competitividad global para República Dominicana
Finalmente, mientras otros países están incentivando la digitalización y promoviendo la tecnología como una herramienta de crecimiento económico, los nuevos impuestos en República Dominicana crean barreras adicionales. Esto afecta la competitividad del país en sectores clave como el turismo, el comercio digital, y la producción de contenido, haciendo que los dominicanos enfrenten mayores dificultades para competir globalmente.
Los nuevos impuestos a plataformas digitales y compras en línea representan un golpe directo al bolsillo de los consumidores dominicanos y a la competitividad de la economía. Mientras otros países avanzan hacia una mayor digitalización, estas medidas parecen retroceder, creando barreras para usuarios, emprendedores y sectores clave que dependen de estas plataformas para su desarrollo.
