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Las sequías, tormentas e inundaciones, fenómenos relacionados con el agua, dominan la lista de catástrofes de los últimos 50 años, según un análisis exhaustivo de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). En un reciente informe, la OMM ha alertado sobre el creciente impacto del cambio climático en los patrones climáticos globales, con inundaciones y sequías volviéndose más frecuentes y severas, afectando a millones de personas en diversas regiones.
Las inundaciones han devastado comunidades en Asia, especialmente en países como India y Bangladesh, así como en América del Sur, donde naciones como Brasil y Argentina han enfrentado lluvias torrenciales que han causado deslizamientos de tierra y pérdida de cultivos. Por otro lado, en África, países como Sudán del Sur y Etiopía, así como en partes de Europa, como España e Italia, las sequías prolongadas están poniendo en riesgo la seguridad alimentaria y el acceso al agua potable.
Expertos advierten que estas condiciones extremas son una consecuencia directa del aumento de las temperaturas globales y hacen un llamado urgente a la acción para mitigar los efectos del cambio climático. La comunidad internacional enfrenta el desafío de implementar soluciones sostenibles que protejan tanto a las personas como al medio ambiente.
