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El presidente Luis Abinader salió al paso de la polémica sobre la reciente disposición del Ministerio de Administración Pública (MAP), que solicita a los empleados públicos informar sobre sus pagos de servicios como electricidad y agua.
Según Abinader, esta medida tiene como fin respaldar a quienes tienen los salarios más bajos en el sector público, prometiendo que su participación será completamente voluntaria.
Durante la LA Semanal, Abinader defendió la iniciativa, argumentando que su objetivo es ofrecer ayuda real, incluso sugiriendo que algunos empleados podrían beneficiarse de un bono luz.
“No se trata de imponer sanciones, sino de fomentar un apoyo solidario”, expresó el mandatario, insistiendo en que la participación de los empleados debe ser libre y sin penalizaciones.
Sin embargo, la pregunta persiste: ¿realmente esta acción va a ayudar a quienes más lo necesitan, o simplemente se queda en un acto simbólico?
La comunicación del MAP, que reafirma que la circular es opcional, deja un espacio para el debate.
¿Estamos ante un verdadero intento de mejorar las condiciones laborales o solo se busca dar una apariencia de acción social?
