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El presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, arribó este miércoles a Washington para dar inicio oficial a la transición de poderes con el presidente saliente, Joe Biden. El avión privado del republicano, apodado ‘Trump Force One’, aterrizó puntualmente a las 9:25 hora local (14:25 GMT) en la base aérea Andrews, ubicada en las afueras de la capital estadounidense, donde Trump fue recibido con la acostumbrada atención mediática.
Desde allí, Trump se dirigió hacia el Capitolio para reunirse con los líderes republicanos de la Cámara de Representantes, incluido Mike Johnson, su nuevo líder en la Cámara Baja.
Durante su primer mandato (2017-2021), Trump contó con el control republicano de ambas cámaras del Congreso durante dos años, lo que parecía indicar una posible repetición de este escenario, ya que el Partido Republicano ha recuperado recientemente el Senado y mantiene su dominio en la Cámara Baja.
A las 11:00 hora local (16:00 GMT), Trump se dirigió a la Casa Blanca para reunirse con Biden en el Despacho Oval. La cita, de carácter histórico, estuvo acompañada por una cobertura limitada de los medios de comunicación, quienes pudieron grabar las declaraciones iniciales de ambos mandatarios antes de que el encuentro continuara a puerta cerrada.
La reunión tiene un simbolismo especial, pues marca un giro respecto a la actitud de Trump durante la transición de 2020, cuando se negó a reconocer la victoria de Biden y difundió teorías de fraude electoral. En esta ocasión, y tras su victoria en las recientes elecciones, Trump aceptó la invitación de Biden a la Casa Blanca, un gesto que busca subrayar la importancia de una transición pacífica y ordenada.
El apoyo de Musk y el futuro gobierno de Trump
En esta jornada, Trump estuvo acompañado por Elon Musk, el magnate de la tecnología y dueño de X, quien fue designado por Trump para liderar el nuevo Departamento de Eficiencia Gubernamental. Musk, conocido por su postura pro-republicana y sus vínculos cercanos con Trump, estuvo presente en varias actividades de la agenda en Washington.
Por su parte, la Casa Blanca ha estado destacando la importancia de una transición ordenada y pacífica, como lo reafirmó la portavoz Karine Jean-Pierre en una rueda de prensa el martes. Biden ha subrayado que la transición de poderes es un símbolo de la fortaleza de las instituciones estadounidenses, las cuales, según la administración saliente, continúan siendo resilientes frente a cualquier desafío.
Una cita con la historia
Este encuentro se produce en un momento crucial para Estados Unidos, después de un periodo electoral que ha estado marcado por tensiones y acusaciones de fraude. Biden, quien en su discurso del 6 de noviembre llamó a una «transición pacífica», enfatizó que este proceso debe ser un ejemplo de civilidad y respeto institucional. Por su parte, Trump no ha realizado comentarios públicos sobre la reunión, prefiriendo concentrarse en la conformación de su futuro gabinete, entre ellos la designación de su jefa de gabinete, Susie Wiles, y el exfuncionario de inmigración, Tom Homan, como su «zar de la frontera».
