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Por segunda vez en menos de tres meses, las costas de San Diego, California, fueron escenario del sorprendente hallazgo de un pez remo (Regalecus glesne), un enigmático animal de las profundidades marinas que raramente se ve en aguas cercanas a la costa. Este avistamiento corresponde al 21.º de su tipo en la historia de California desde 1901, lo que lo convierte en un evento extremadamente raro y significativo.
El pez remo, también conocido como regaleco o pez sable, ha estado envuelto en un halo de superstición y misterio a lo largo de los siglos. Su aparición es considerada por algunos como un presagio de desastres naturales. En particular, una antigua leyenda japonesa sostiene que la presencia de estos peces en aguas poco profundas es un indicio de terremotos inminentes.
Este mito cobró fuerza en 2011, cuando una serie de avistamientos de peces remo precedió al devastador terremoto de Tohoku en Japón, el cual generó un gigantesco tsunami. Desde entonces, la idea de que estos peces tienen un vínculo profético con desastres naturales ha resurgido, alimentando especulaciones y teorías en todo el mundo.
La aparición reciente en las costas californianas ha vuelto a generar debate y comentarios entre expertos y ciudadanos. En declaraciones al Scripps Institution of Oceanography (SIO), los investigadores señalaron que el hallazgo plantea «muchas preguntas» sobre la naturaleza de estos animales y su posible relación con eventos catastróficos. La noticia fue ampliamente difundida por medios como Fox News, que no dudaron en calificar al pez remo como el «pez del juicio final».
A pesar de las teorías sobre su vinculación con terremotos o catástrofes, los científicos aseguran que el pez remo es una especie poco comprendida que vive en las profundidades del océano y cuya aparición en la superficie podría deberse a diversas razones biológicas, como cambios en la temperatura del agua o alteraciones en su hábitat natural.
El avistamiento de estos seres tan raros sigue fascinando tanto a biólogos marinos como a aficionados al misterio, quienes se mantienen atentos a futuros hallazgos, especialmente en un contexto en el que fenómenos naturales como terremotos y tsunamis siguen siendo un tema de preocupación global.
