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El nuevo primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aimé, anunció este jueves nuevas medidas para reforzar la seguridad en el área metropolitana de la capital, Puerto Príncipe. El mandatario reafirmó su determinación de garantizar la libre circulación de bienes y personas, una prioridad esencial para la estabilidad del país.
En un comunicado publicado en las redes sociales de la Oficina del Primer Ministro, Fils-Aimé expresó su compromiso para desbloquear las principales carreteras controladas por las pandillas, destacando la importancia de restaurar el orden en las principales vías de transporte del país, esenciales para la economía y la vida cotidiana. «Estoy decidido a garantizar la libre circulación de bienes y personas», afirmó, en referencia a la lucha contra los grupos armados que han sembrado el terror en el país.
Estas nuevas medidas llegan en un momento crítico, tras una ofensiva de las bandas armadas que ha intensificado la violencia, con un saldo de más de 4,500 muertos en lo que va del año, según cifras de Naciones Unidas. El aumento de la inseguridad también ha provocado el desplazamiento forzoso de más de 700,000 personas, la mitad de ellas menores de edad.
En su discurso, Fils-Aimé hizo un llamado a la unidad nacional, instando a los ciudadanos a colaborar en la restauración de la paz social. «La participación de todos es esencial para la estabilización del país», indicó el primer ministro, quien también expresó su apoyo a las fuerzas de seguridad, a las que calificó de «plenamente comprometidas» con la protección de la vida y el restablecimiento de la autoridad del Estado.
Esta intervención se produce después de que las fuerzas de seguridad lanzaran una serie de operativos contra las bandas armadas, que resultaron en la muerte de decenas de pandilleros, algunos de los cuales fueron posteriormente incinerados por los civiles. Los operativos también han permitido la reactivación de la distribución de productos petroleros, un paso crucial para aliviar la crisis de combustible que afecta al país.
Fils-Aimé renovó su compromiso de buscar «soluciones duraderas» a los problemas de seguridad y violencia que aquejan a Haití, mientras pidió a la población mantener la calma y actuar con solidaridad. «Es responsabilidad de las fuerzas públicas actuar con firmeza y determinación», subrayó.
Finalmente, el primer ministro destacó que todo su gabinete trabajará en conjunto para restablecer la seguridad, un desafío de magnitud crítica en un país que enfrenta una de las peores crisis de violencia en su historia reciente.
