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Santo Domingo.- El presidente Luis Abinader abordó este lunes la situación laboral en sectores estratégicos como la construcción y la agricultura, en medio de las políticas migratorias implementadas por su gobierno. En una declaración ante los medios, el mandatario reconoció los retos que enfrentan estos sectores debido a la falta de mano de obra, pero subrayó que la seguridad nacional es la principal prioridad de su administración.
Abinader destacó que, a pesar de los problemas laborales, el objetivo de su gobierno es reemplazar los trabajadores extranjeros por mano de obra dominicana. «Nosotros lo que queremos es que se sustituyan los trabajadores extranjeros por trabajadores dominicanos», afirmó el presidente, haciendo énfasis en la importancia de impulsar el empleo local.
En su intervención, Abinader respondió a las inquietudes planteadas por varios miembros de su gabinete, como el ministro de Agricultura, quienes expresaron su preocupación por el impacto de las medidas migratorias en la disponibilidad de trabajadores para actividades clave, especialmente en la cosecha agrícola y en la construcción de infraestructuras.
Sin embargo, el presidente fue claro en su postura: «Por encima de todo está la seguridad nacional y yo tengo que proteger este país», reiteró, añadiendo que su administración está comprometida con un balance adecuado entre la protección de la soberanía y la atención a las necesidades económicas del país.
Medidas Migratorias y su Impacto en la Fuerza Laboral
El gobierno ha implementado una serie de medidas migratorias con el objetivo de regularizar la presencia de trabajadores extranjeros en el país, un tema que ha generado debate en diversos sectores productivos. Aunque la gestión de Abinader ha recibido elogios por su enfoque en la seguridad nacional, algunos líderes empresariales y productores han manifestado su preocupación por la escasez de mano de obra que podría surgir como consecuencia de las restricciones a la inmigración.
No obstante, el presidente reiteró que su compromiso con la seguridad de los ciudadanos dominicanos prevalecerá sobre cualquier otro desafío económico. «Entendemos las dificultades, pero lo más importante es proteger a nuestra gente», concluyó.
Con esta declaración, Abinader dejó claro que su gobierno seguirá enfocándose en una estrategia integral que garantice la estabilidad económica sin comprometer la soberanía del país.