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Diputados del oficialismo manifestaron preocupación por las aspiraciones presidenciales prematuras de algunos funcionarios y dirigentes del Gobierno, a solo cuatro años de las elecciones de 2028. Aunque coincidieron en que este fenómeno podría desviar la atención del trabajo gubernamental, también valoraron positivamente los primeros cien días del segundo mandato del presidente Luis Abinader.
El diputado Rosendy Polanco expresó su opinión de que los funcionarios y líderes que ya están mostrando interés en la presidencia están actuando «a destiempo», y subrayó que, en lugar de enfocarse en proyectos personales, deberían centrarse en respaldar la gestión del Gobierno. «Lo que tienen que hacer es cuidar al Gobierno, no dividirlo», enfatizó Polanco, quien también aplaudió los logros alcanzados en los primeros tres meses del nuevo mandato.
Por su parte, Pedro Martínez, otro diputado aliado al Gobierno, consideró «prematuro y extemporáneo» que ya estén surgiendo aspirantes a la presidencia dentro de las filas del oficialismo. Sin embargo, reconoció que todos los ciudadanos tienen el derecho de aspirar a la presidencia, tal como lo establece la Constitución, aunque advirtió que este tipo de movimientos podría generar distracciones dentro del partido.
Aníbal Díaz, también miembro del Partido Revolucionario Moderno (PRM), apuntó que, aunque algunos dirigentes ya están promoviendo sus nombres, «todavía no hay aspiraciones formales». En este contexto, Díaz destacó la figura de Carolina Mejía, a quien definió como «un orgullo para esta sociedad», dejando entrever que la alcaldesa de Santo Domingo podría ser una de las posibles cartas del oficialismo para las próximas elecciones.
A pesar de las tensiones internas, todos los legisladores coincidieron en valorar positivamente los primeros cien días del presidente Abinader, señalando avances importantes en áreas como la seguridad, la economía y la política social. Aplaudieron la estabilidad que ha logrado mantener el Gobierno en un entorno económico y político complejo, y reafirmaron su compromiso con la gestión en curso.
Mientras tanto, la discusión sobre las aspiraciones presidenciales sigue marcando el pulso del oficialismo, a medida que los diferentes actores políticos se preparan para los próximos años.
