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La Policía Nacional y la Guardia Civil de España han desarticulado una organización criminal formada en su mayoría por miembros de la banda Trinitarios, que estaba implicada en la realización de transferencias bancarias fraudulentas por un total de 429.000 euros, así como en la usurpación de la identidad de al menos 100 personas. La operación, llevada a cabo con la colaboración de las autoridades suizas, culminó con la detención de 20 personas, de las cuales 16 fueron arrestadas en España y cuatro en Suiza, tras la ejecución de 14 registros en territorio español y otros cuatro en el país alpino.
El modus operandi de los detenidos consistía en utilizar la técnica conocida como SIM swapping, que consiste en duplicar, sin el consentimiento de las víctimas, las tarjetas SIM de sus teléfonos móviles. De este modo, los miembros de la organización lograban tomar control de las líneas telefónicas de sus víctimas, interceptando sus comunicaciones bancarias y accediendo a sus fondos mediante códigos de verificación enviados por SMS. Además, los delincuentes abrían nuevas cuentas bancarias utilizando las identidades robadas, apoyándose en documentación falsa y personas interpuestas para completar el proceso.
Una vez obtenidas las cuentas fraudulentas, las sumas de dinero sustraídas eran transferidas a miembros de la organización establecidos en Suiza, donde los fondos eran ocultados en cuentas bajo el control del grupo criminal.
En el marco de los registros realizados durante la operación, las fuerzas de seguridad intervinieron un arsenal compuesto por un subfusil, cuatro escopetas, tres pistolas detonadoras, 47 teléfonos móviles, cuatro tabletas, siete ordenadores portátiles, así como numerosos dispositivos de almacenamiento informático. También se hallaron material relacionado con la falsificación de identidades, como tarjetas de identidad falsificadas, soportes de tarjetas bancarias en blanco y una copiadora de banda magnética, lo que demuestra la dimensión de la operación ilícita.
La investigación, que comenzó en diciembre de 2021, ha revelado cómo los detenidos obtenían grandes sumas de dinero mediante estafas informáticas, lo que ha permitido desmantelar una red criminal bien estructurada que operaba tanto en España como en Suiza. La operación ha sido calificada como un éxito por parte de las autoridades, que continúan con la investigación para identificar a más personas involucradas en el fraude.
El Ministerio del Interior español ha destacado la importancia de la colaboración internacional en este tipo de operaciones, así como el uso de tecnologías avanzadas por parte de los cuerpos de seguridad para desmantelar organizaciones criminales transnacionales.