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En un impactante giro durante el macrojuicio que se lleva a cabo en relación a las agresiones sexuales sufridas por Gisèle Pelicot, su exesposo Dominique Pelicot ha reconocido su culpabilidad y ha extendido esta responsabilidad a los otros 50 acusados. Desde 2011 hasta 2020, Pelicot fue acusado de agredir sexualmente a su entonces esposa y de ofrecerla a decenas de hombres para que la violaran.
Durante su declaración este lunes, Pelicot afirmó: “Todos los que están aquí, a pesar de la presunción de inocencia, son culpables, como yo”. Se reveló que utilizaba altas dosis de ansiolíticos para dejar a Gisèle en estado de inconsciencia, poniendo en grave riesgo su vida.
La jornada estuvo dedicada a las últimas declaraciones de los acusados antes de que los jueces inicien sus deliberaciones, con un veredicto esperado para el jueves. Pelicot también destacó el “coraje” de su exmujer a lo largo del juicio y pidió disculpas a la pareja de Jean-Pierre Maréchal, el único acusado que no agredió a Gisèle, sino a su propia esposa.
El principal acusado enfrenta una pena máxima de 20 años de prisión y concluyó su declaración agradeciendo a su abogada, Béatrice Zavarro, y al tribunal, expresando que “la privación de no ver a los suyos es peor que la privación de libertad”.
Jean-Pierre Maréchal, quien también se encuentra en el banquillo, reconoció los hechos que se le imputan y pidió ser juzgado por sus acciones. La mayoría de los otros acusados optaron por no declarar, aunque algunos expresaron su agradecimiento por el desarrollo del juicio y reiteraron sus disculpas a la víctima. Sin embargo, otros insistieron en negar los hechos, a pesar de la abrumadora evidencia presentada, que incluye miles de fotos y vídeos documentando los delitos.
Gisèle Pelicot ha emergido como un símbolo del feminismo mundial, eligiendo que el juicio sea público y asistiendo a las sesiones a cara descubierta, con el objetivo de “cambiar la vergüenza de bando”.