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Las playas de Boca Chica y Guayacanes se convirtieron en el destino preferido de cientos de personas este 25 de diciembre, incluyendo turistas extranjeros, quienes optaron por disfrutar de un día de mar, sol y relajación.
Escape del bullicio de la ciudad
Visitantes provenientes de Santo Domingo aprovecharon la oportunidad para escapar del ajetreo citadino y compartir en familia en un ambiente más tranquilo. Rosa de la Cruz, una de las asistentes, expresó: “Estábamos muy aburridos en casa, todo el mundo encerrado; aquí nos sentimos bien y en ambiente”.
Bajas ventas para comerciantes locales
A pesar de la notable afluencia de personas, los comerciantes de la zona no reportaron un aumento significativo en sus ingresos. Según testimonios, muchos visitantes optaron por llevar su propia comida, en su mayoría restos de la cena de Nochebuena. Un vendedor habitual señaló: “La gente está trayendo su comida”, aunque mostró optimismo de que las ventas repunten durante las festividades de Año Nuevo.
Extranjeros destacan el encanto de las playas dominicanas
Turistas internacionales también acudieron a disfrutar de las playas y no escatimaron en elogios. Gustavo Martínez, visitante mexicano, comentó: “Estamos en temporada de fin de año, vinimos desde México y nos ha encantado el calor tropical”.
La combinación de hermosos paisajes, clima cálido y un ambiente familiar consolidan a Boca Chica y Guayacanes como destinos ideales para las celebraciones navideñas. Tanto locales como extranjeros esperan continuar esta tradición en los años venideros.
