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Santo Domingo, RD – El presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó este domingo que las 9.8 toneladas de cocaína incautadas en República Dominicana en las últimas semanas tenían su origen en Colombia. El mandatario detalló en su cuenta de X (anteriormente Twitter) que la droga fue vinculada a “grupos armados del Catatumbo”, una región conocida por ser un centro de operaciones de grupos guerrilleros y paramilitares en Colombia.
La incautación, que se realizó el 6 de diciembre en el Puerto Multimodal Caucedo, en Boca Chica, cerca de la capital dominicana, marcó el mayor decomiso de cocaína en la historia del país. Las autoridades dominicanas hallaron 320 sacos que contenían 9.588 kilogramos de la droga, valorada en 250 millones de dólares. La sustancia ilícita se encontraba en dos contenedores de banano que fueron enviados desde Guatemala, con destino final a Bélgica.
Aunque inicialmente el origen de la droga generó controversia, con Guatemala y Honduras involucradas en la investigación, Petro subrayó que el decomiso fue posible gracias a la cooperación de Colombia. Según el presidente colombiano, la inteligencia policial de su país jugó un papel crucial en la incautación de la cocaína.
La conexión con el Catatumbo
El Catatumbo, una región del noreste colombiano en el departamento de Norte de Santander, es conocida por su alta actividad narcotraficante y por la presencia de varios grupos armados ilegales, como las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Ejército Popular de Liberación (EPL). La zona, rica en recursos naturales y estratégicamente ubicada cerca de la frontera con Venezuela, es un punto clave en las rutas de tráfico de drogas.
Detalles de la incautación
El operativo que llevó a la incautación de la droga fue llevado a cabo por la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) de República Dominicana, con la colaboración de otras agencias locales. La cocaína fue incinerada en presencia de la procuradora general, Miriam Germán Brito. La operación también involucró la investigación de al menos 10 personas, cuyos detalles aún están siendo analizados por las autoridades dominicanas.
Este decomiso resalta la creciente cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico, particularmente entre Colombia y República Dominicana, en un esfuerzo por desmantelar las redes de tráfico que afectan a ambos países y a la región en general.
