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Los votantes alemanes eligen este domingo un nuevo gobierno en unas elecciones marcadas por preocupaciones sobre el estancamiento económico, la inmigración, la incertidumbre sobre Ucrania y la alianza con Estados Unidos. La oposición de centroderecha se perfila como favorita, aunque las encuestas apuntan al mejor resultado para un partido de extrema derecha desde la II Guerra Mundial.
Alemania, el país más poblado de la Unión Europea y miembro clave de la OTAN, ha sido el segundo mayor proveedor de armas de Ucrania después de Estados Unidos. Su papel será crucial para la política exterior y comercial en los próximos años.
Los candidatos principales El líder conservador Friedrich Merz y el actual canciller socialdemócrata Olaf Scholz votaron con pocos minutos de diferencia en distintas partes del país.
La votación Más de 59 millones de alemanes están habilitados para votar y elegir a los 630 miembros del Bundestag, la cámara baja del parlamento. Dado que el sistema electoral raramente otorga mayorías absolutas, se espera una coalición que podría tardar semanas o meses en formarse.
Escenarios políticos Merz lidera las encuestas con un 28-32% de apoyo y es el favorito para reemplazar a Scholz. Los socialdemócratas de Scholz oscilan entre el 14-16%, lo que podría significar su peor resultado desde la posguerra.
El partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) ha alcanzado un histórico 20% de intención de voto. Sin embargo, otros partidos han asegurado que no formarán alianzas con él.
Los Verdes, liderados por el vicecanciller Robert Habeck, están ligeramente por detrás de los socialdemócratas.
Merz busca una coalición de dos partidos, pero podría necesitar un tercer socio para gobernar. Los posibles aliados incluyen a los socialdemócratas, los Verdes y los Liberal Demócratas, quienes podrían perder su representación parlamentaria si no alcanzan el umbral del 5% de votos.
Temas clave La economía alemana lleva dos años en contracción y será un tema central para el nuevo gobierno. La inmigración también ha dominado la campaña, con Merz proponiendo restricciones más severas.
El apoyo a Ucrania también ha sido un punto de debate. Alemania alcanzó el objetivo de la OTAN de destinar el 2% del PIB a defensa, pero el próximo gobierno deberá encontrar una forma de mantener este gasto cuando se agote el fondo especial de 100.000 millones de euros en 2027.
Fuente: AP