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Este domingo, Ecuador celebró la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, con dos principales contendientes: el actual presidente Daniel Noboa y la candidata del correísmo, Luisa González. Más de 13,7 millones de ecuatorianos acudieron a las urnas para decidir quién gobernará el país hasta 2029.
Noboa, quien busca la reelección, y González, exdiputada y abogada de izquierda, protagonizan una disputa muy polarizada. En las elecciones de 2023, Noboa ganó por un estrecho margen de casi 4 puntos, y las proyecciones de esta jornada apuntan a una nueva victoria ajustada.
González hizo un llamado a las Fuerzas Armadas y la Policía para que no interfirieran en el proceso electoral y garantizaran la seguridad y transparencia en el conteo de votos. Por su parte, Noboa expresó optimismo tras votar en la provincia de Santa Elena, acompañado de su familia.
La jornada electoral se desarrolla en medio de un clima de inseguridad creciente debido a la violencia criminal en el país, que ha aumentado los índices de homicidios. Para resguardar la seguridad, se desplegaron casi 100.000 efectivos de las fuerzas de seguridad en todo el territorio.
A pesar de la fuerte polarización, ambos candidatos han reunido apoyo de diversas fuerzas políticas, buscando soluciones a los problemas de seguridad, economía y justicia social. La atención está ahora en los resultados, que definirán el futuro político de Ecuador.