A solo días de despedir el 2025 y con el Año Nuevo marcado para este jueves 1 de enero de 2026, en los hogares dominicanos comienzan a repetirse los rituales y costumbres populares con los que muchos esperan atraer buena suerte para el año que inicia.
Entre las prácticas más comunes está sacar una maleta a la medianoche, tradición que simboliza el deseo de viajar más durante los próximos meses. Otros apuestan por vestirse de amarillo, color asociado a la prosperidad, el dinero y la buena fortuna, mientras no faltan quienes combinan colores según sus aspiraciones personales.
También es habitual comer las doce uvas al ritmo de las campanadas, pedir un deseo por cada una y guardar dinero en los bolsillos o en la cartera para atraer estabilidad económica. En algunos hogares se acostumbra barrer la casa antes de las doce para “sacar lo malo” del año que termina, o encender velas como símbolo de luz y nuevos comienzos.
Todo esto se hace entre brindis, música, risas y reuniones familiares, en un ambiente donde la tradición se mezcla con el relajo criollo. Aunque para algunos no pasan de simples supersticiones, para otros estas prácticas forman parte del folclore dominicano, una forma alegre de despedir el año viejo y darle la bienvenida al nuevo.
Así, entre colores, rituales y deseos compartidos, el dominicano recibe el 2026 con esperanza, optimismo y buen humor, convencido de que comenzar el año con buenas energías nunca está de más.
