|
Getting your Trinity Audio player ready...
|
La alfombra roja de los Latin Grammy brilló este jueves con una mezcla de moda conceptual, simbólica y clásica, en una noche que celebró no solo la música latina, sino también la creatividad y el estilo de los artistas más destacados del momento. Con motivo del 25º aniversario de los premios, figuras de renombre como Mon Laferte, Jay de la Cueva, Alejandro Fernández, Ali Stone y María Becerra sorprendieron a los asistentes con trajes que iban más allá de la estética convencional, representando sus proyectos musicales a través de sus vestuarios.
El evento, que tuvo lugar en el Kaseya Center de Miami, se convirtió en una pasarela de creatividad, donde los artistas dieron rienda suelta a sus personalidades y visiones artísticas.
Mon Laferte, por ejemplo, apostó por un diseño que rompió esquemas, mientras que Jay de la Cueva y Alejandro Fernández también se inclinaron por propuestas atrevidas que reflejaron sus carreras innovadoras. Ali Stone y María Becerra no se quedaron atrás, mostrando looks vanguardistas que conectaban con la energía de la música urbana.
Pero no solo los diseños más arriesgados acapararon las miradas. Los artistas que optaron por un estilo más clásico también fueron protagonistas. Kany García, Nathy Peluso, Ángela Aguilar y su esposo Christian Nodal, Marc Anthony y su esposa Nadia Ferreira, así como las conductoras de Univisión Amara La Negra y Jessica Rodríguez, y la cantante brasileña Anitta, apostaron por atuendos elegantes y sofisticados que seguían las tendencias tradicionales pero con toques modernos.
Nathy Peluso, quien ya había sido galardonada con tres Latin Grammys antes de la ceremonia, explicó su elección de vestuario. Enfundada en un traje de corte sirena de color rosa pálido, la cantante argentina confesó que su look representaba «algo fresco, elegante y calmo», a la vez que destacó la «bipolaridad» que la caracteriza, tanto en su estilo como en su música. Su maquillaje, minimalista y dentro de la tendencia de la «cara lavada», complementaba su imagen de autenticidad.
Por su parte, Kany García deslumbró con un vestido negro que, aunque parecía clásico a simple vista, incluía un profundo escote que llegaba hasta la rodilla, rompiendo con las convenciones. La cantautora puertorriqueña compartió que su elección representaba «parte tradición, parte riesgos», una declaración de su compromiso con la evolución de la música latina.
La alfombra roja de los Latin Grammy 2024 demostró una vez más que la moda es una poderosa forma de expresión artística, capaz de transmitir historias y emociones, y de reflejar la diversidad y el dinamismo del panorama musical latino.
