Santo Domingo, RD. – El ministro de Industria y Comercio, Víctor «Ito» Bisonó, respaldó este jueves el Decreto 624-24 emitido por el presidente Luis Abinader, el cual regula la importación de arroz, afirmando que su principal objetivo es salvaguardar la producción nacional.

Durante su participación en el programa radial El Sol de la Mañana, Bisonó explicó que la decisión está fundamentada en un análisis detallado y en los derechos contemplados en el acuerdo DR-CAFTA. Según el ministro, este acuerdo, firmado hace 20 años, responde a una realidad económica diferente a la actual.

“El acuerdo de DR-CAFTA tiene 20 años, y no es la misma época en que se firmó a la fecha, incluyendo la mejoría del productor nacional en calidad y cantidad”, destacó Bisonó, asegurando que la competitividad de los productores dominicanos es un factor clave para tomar esta medida.

El ministro también citó el artículo 21.2 del tratado comercial, el cual permite a los países miembros implementar salvaguardias para garantizar la seguridad alimentaria. Señaló que esta disposición ya ha sido utilizada por otros firmantes del acuerdo.

Decisión consensuada

Bisonó aseguró que la decisión fue tomada tras un proceso de consulta con los principales actores del sector. “Después de un análisis ponderado se hizo una mesa de trabajo con los principales actores y se tomó la decisión que el presidente [Luis Abinader] nos encomendó de proteger la producción nacional”, explicó.

Respuesta a críticas

En relación con los señalamientos del exfuncionario Carlos Segura Foster, quien calificó el decreto como «inoportuno e innecesario», Bisonó rechazó dichas críticas, argumentando que Estados Unidos también ha recurrido a mecanismos similares en el pasado, como la imposición de aranceles a las varillas dominicanas exportadas a Puerto Rico.

“Hoy lo que prima es la protección nacional y el respeto a los acuerdos. Están de acuerdo los demás sectores productivos”, aseguró el ministro.

Finalmente, Bisonó instó a celebrar esta medida como un logro en la defensa de los productores nacionales, resaltando que se consultó a Estados Unidos antes de implementar el decreto, garantizando el cumplimiento de los compromisos internacionales.