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El principal partido de la oposición de Corea del Sur, el Partido Democrático, presentó una moción el jueves para destituir al líder interino del país, Han Duck-soo, debido a su renuencia a nombrar jueces para llenar tres vacantes en el Tribunal Constitucional. La controversia ha surgido en medio de la revisión judicial sobre los cargos de rebelión contra el presidente destituido Yoon Suk Yeol, relacionados con su breve decreto de ley marcial emitido el 3 de diciembre.
El Partido Democrático acusa a los conservadores, liderados por el Partido del Poder Popular de Yoon, de socavar el proceso judicial para proteger la presidencia de Yoon. La moción de destitución de Han podría votarse en el pleno de la Asamblea Nacional tan pronto como este viernes. Según el líder parlamentario de los Demócratas, Park Chan-dae, los comentarios de Han sobre la necesidad de un consentimiento bipartidista para los nombramientos reflejan una falta de calificaciones para servir como líder interino y una negativa a defender la Constitución.
La disputa se centra en la negativa de Han a nombrar a tres jueces del Tribunal Constitucional sin un acuerdo bipartidista. El presidente de la Asamblea Nacional, Woo Won Shik, instó a Han a actuar con rapidez y nombrar a los jueces, argumentando que su insistencia en el consentimiento bipartidista infringe el derecho de la Asamblea a seleccionar jueces del tribunal.
El Tribunal Constitucional está en medio de deliberaciones cruciales sobre si destituir o reintegrar a Yoon, después de que la Asamblea Nacional votara para destituirlo el 14 de diciembre debido a su intento de tomar el poder mediante un decreto de ley marcial que solo duró horas. La destitución de Yoon, sin embargo, no se formalizará hasta que el tribunal resuelva los cargos. Para que Yoon sea removido oficialmente, se necesita el voto de al menos seis de los nueve jueces del Tribunal Constitucional, y tres de estos asientos están vacíos.
La situación política se complica aún más por la ambigüedad legal en torno a los procedimientos de destitución de un presidente interino. Mientras el Partido Democrático controla 170 de los 300 escaños en la Asamblea Nacional, necesitará el apoyo de otros partidos para alcanzar la mayoría de dos tercios requerida para destituir a Han.
Han, por su parte, ha defendido su decisión de no nombrar a los jueces del Tribunal Constitucional hasta que los partidos gobernantes y de oposición lleguen a un acuerdo, argumentando que el presidente interino debe evitar ejercer poderes significativos, como los nombramientos en instituciones constitucionales, mientras el país atraviesa una crisis política.
En paralelo, Yoon enfrenta cargos de rebelión por su intento de instaurar la ley marcial, mientras que varios de sus colaboradores, incluidos el ministro de Defensa y el jefe de policía, han sido arrestados por su participación en el intento. Yoon ha eludido varias solicitudes de interrogatorio y ha bloqueado registros de su oficina, insistiendo en que su decreto de ley marcial tenía como objetivo alertar sobre un abuso político por parte de la oposición.
El conflicto político continúa sacudiendo una de las democracias más robustas de Asia, con tensiones entre el poder ejecutivo y legislativo que podrían tener repercusiones profundas en la estabilidad del país.
