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La ministra de Cultura, Milagros Germán, y el viceministro de Cultura, Giovanny Cruz, han instado al comunicador Luinny Corporán a tomar una pausa en los medios de comunicación. Esta recomendación surge tras una controversia generada por una reciente entrevista en el programa de Corporán, en la cual se abordó un tema altamente sensible.
El escándalo estalló después de que Luinny Corporán entrevistara a la madre del artista urbano Dilon Baby, revelando detalles íntimos y polémicos sobre su relación con su hijo. La entrevista ha generado una ola de críticas y preocupación entre los funcionarios culturales, quienes han expresado su indignación frente al contenido y el enfoque del programa.
En un comunicado dirigido a Corporán, Giovanny Cruz, presidente interino de la Comisión de Espectáculos Públicos, criticó duramente el contenido de «Fogaraté Radio», el programa conducido por el comunicador. Cruz subrayó que el reciente material emitido ha causado descontento no solo entre los colaboradores de Corporán, sino también entre la audiencia, instando al comunicador a reflexionar sobre el impacto de su trabajo y su responsabilidad ética.
El documento enviado a Corporán señala: “La ministra Milagros Germán ha sugerido una pausa en tu actividad mediática para que puedas reconsiderar el tipo de contenido que estás generando. Tu reciente trabajo ha suscitado preocupación y desdén, tanto dentro de tu equipo como entre el público general. Te insto a tomar un tiempo para analizar la dirección de tu programa y sus repercusiones”.
La polémica también ha sido alimentada por la suspensión de 10 días impuesta a «Fogaraté Radio» por parte de la Comisión Nacional de Espectáculos Públicos, y una suspensión adicional de 30 días a la comunicadora Tamara Martínez, debido a comportamientos inadecuados observados en el programa. Tras la suspensión, Luinny Corporán solicitó una reducción del castigo, calificándolo como una medida injusta.
A pesar de la controversia, algunos internautas han manifestado su desaprobación hacia las acciones de Corporán, reflejando un creciente descontento con el contenido de su programa. La recomendación de los funcionarios culturales parece ser un llamado a una introspección necesaria en un momento de creciente escrutinio público.
