Getting your Trinity Audio player ready...
|
China aseguró este martes que «siempre se ha adherido al espíritu de apertura científica y transparencia» y que ha «apoyado activamente la investigación mundial» sobre el origen del coronavirus. Estas declaraciones se producen un día después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) solicitara a Pekín mayor claridad sobre el origen de la pandemia de covid-19, cuyo quinto aniversario se conmemora este año.
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, destacó en una rueda de prensa que su país fue «el primero en compartir información sobre el brote y la secuencia genética del virus con la OMS y la comunidad internacional». Además, subrayó que China ha compartido su experiencia en prevención, control, diagnóstico y tratamiento, contribuyendo significativamente a los esfuerzos globales para combatir la pandemia.
Mao afirmó que China ha «invitado en múltiples ocasiones a grupos internacionales de expertos de la OMS para cooperar en la investigación sobre el origen del coronavirus». Según la portavoz, los expertos que visitaron el país tuvieron acceso a los lugares, personas y materiales que solicitaron.
La OMS, por su parte, reiteró este lunes la importancia de que China comparta datos clave sobre el origen del virus. «Es un imperativo moral y científico, pues sin transparencia y cooperación entre países el mundo no podrá prepararse para futuras epidemias y pandemias», señaló la organización en un comunicado.
Aunque las misiones de la OMS que viajaron a China en dos ocasiones no han logrado conclusiones definitivas, los expertos mantienen abiertas todas las teorías, incluida la de una posible fuga de laboratorio, aunque consideran más probable un salto del virus al ser humano desde animales.
En los cinco años desde los primeros casos notificados en diciembre de 2019, la OMS registra 777 millones de contagios y 7 millones de muertes por covid-19. Sin embargo, la agencia admite que estas cifras son conservadoras, y que el número real de fallecidos podría superar los 20 millones, considerando el exceso de mortalidad durante este período.
Mao Ning insistió en que la investigación sobre los orígenes del virus debe expandirse a nivel global y no centrarse únicamente en China. «Cada vez hay más pistas en la comunidad científica internacional que apuntan al origen del virus a escala mundial», afirmó la portavoz.
La postura de Pekín refleja su rechazo a lo que considera «maniobras políticas» en torno a este tema, reafirmando su compromiso con una colaboración científica amplia y multilateral para entender el origen de la pandemia y prevenir futuras crisis de salud pública.